“Queridos padres,
Los exámenes de sus hijos van a comenzar pronto. Sé que están todos muy ansiosos y quieren que sus hijos lo saquen todo bien. Pero, por favor recordad que entre todos esos estudiantes que se sentarán en estos exámenes, hay un artista, que no necesita comprender las Matemáticas… Hay un emprendedor, al que no le importa la Historia o la Literatura Inglesa… Hay un músico, cuyas notas en Química no importarán… Hay un atleta… cuyo nivel físico será más importante que su Física… Si tu hijo consigue las mejores notas, ¡está bien!, pero si no lo consigue, por favor no les quitéis esa confianza en sí mismos ni su dignidad. Decidles que ¡está bien, solo es un examen!. Están hechos para cosas más grandes en su vida. Decidles, no importa qué notas saquen… Los quieres y no les juzgarás.
Por favor, haced esto, y cuando lo hagáis, observad cómo vuestros hijos conquistan el mundo. Un examen o una nota baja no les quitarán sus sueños ni su talento.
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